El mercado inmobiliario español bate récords “mes a mes” mientras se agrava la inaccesibilidad
28/08/2025 - ⏱️ 2 min
El sector inmobiliario español vive un arranque de 2025 sin precedentes: según El País, mes tras mes se registran cifras récord en precios de compra y alquiler, transacciones e inversión financiera, en un contexto que revela las profundas disfunciones de acceso al mercado para la clase media.
Auge imparable en transacciones y ventas
El Instituto Nacional de Estadística (INE) refleja una tendencia sólidamente alcista: en junio, la compraventa de viviendas creció un 17,9 % interanual, alcanzando 59 021 operaciones —duodécimo mes consecutivo de repunte— (madrid45.tecnocasa.es; ElHuffPost; Wikipedia). Además, en mayo se registró un alza del 39,7 % interanual, con 61 054 transacciones, siendo el mejor mayo desde 2007 (El País; infobae; ElHuffPost).
En conjunto, el primer semestre de 2025 acumula 357 533 compraventas, superando en un 20 % el mismo periodo del año anterior, y marcando el volumen más elevado desde los tiempos previos a la crisis inmobiliaria de 2007 (Cadena SER; El País; nieuwbouwtenerife.com).
Subidas históricas en precios de compra y alquiler
El encarecimiento no se limita a las ventas: el mercado de alquiler está experimentando un alza sin precedentes. En junio, el precio medio fue de 14,38 €/m² mensuales, con un aumento interanual del 14 %, niveles que superan los máximos registrados durante la burbuja de 2007 (El País). Todas las comunidades autónomas alcanzaron máximos históricos en algún momento del año, con Madrid encabezando la lista en 21,55 €/m² (El País).
En paralelo, los precios de venta también muestran una escalada sostenida. Aunque fuentes como Idealista reportan incrementos mensuales del 1,4 % en julio, acumulando un aumento interanual del 14,7 % (Idealista), el INE y otros organismos alertan de una trayectoria continuada de alzas estructurales (El País).
Inversión creciente y polarización del mercado
El mercado no solo está más activo, sino que también atrae más capital. Según JLL, la inversión en el negocio residencial aumentó un 87 % entre 2020 y 2024, alcanzando los 13 900 millones de euros, situando a España en la segunda posición global por crecimiento, solo por detrás de Italia.
En este contexto, el perfil de comprador también cambia: Cadena SER destaca que solo el 14 % de las hipotecas se destinan a primera vivienda, mientras que el 56 % corresponde a inversores, bancos u otras entidades. Los compradores extranjeros representan el 14,6 % de las transacciones, muchos de ellos mediante pagos al contado y en zonas costeras o insulares.
La asequibilidad como crisis encubierta
A pesar de estos récords, el acceso real a la vivienda se hunde. Según Huffington Post, los jóvenes destinan hasta el 92,3 % de sus ingresos al alquiler, mientras que la tasa de emancipación se sitúa en apenas el 15,2 % —un mínimo histórico—.
Estos datos evidencian una paradoja: el mercado crece, pero deja fuera a su base social más vulnerable. El País sintetiza el dilema: mientras el sector inmobiliario acumula cifras históricas, si la clase media no puede acceder a una vivienda, "algo no está funcionando".
Conclusión
España atraviesa una fase espectacular en el real estate: transacciones, precios e inversión financiera alcanzan niveles sin precedentes. Sin embargo, este vigor concita tensiones sociales y estructurales: la vivienda deja de ser un bien de acceso básico y se consolida como un activo de inversión inaccesible para muchos.
El “rally inmobiliario” está polarizando el mercado. En lugar de democratizar el acceso, lo restringe. La tensión entre crecimiento financiero y acceso social plantea una encrucijada que exige decisiones políticas urgentes si se quiere evitar que el derecho fundamental a la vivienda sea desplazado por lógicas puramente especulativas.
Suscríbete para recibir análisis independientes, datos exclusivos y seguimiento puntual del mercado inmobiliario.
Este artículo es meramente informativo y no debe interpretarse nunca como una recomendación de inversión.